Las empresas B Corp crecen a un ritmo anual medio del 30%

Memoria BCorp 2021

El movimiento B Corp, del que Transcendent forma parte, se consolida en España incorporando un 63% de empresas más que en 2020.

Formado por compañías que cumplen con los más altos estándares de desempeño social y ambiental, transparencia pública y responsabilidad legal, el movimiento B Corp sigue creciendo. En 2021, el incremento ha sido del 63% respecto a 2020.

En concreto, se han incorporado 31 nuevas empresas a la comunidad B Corp en España y ya son un total de 110 compañías las que conforman la comunidad BCorp en nuestro país.

Estas empresas crecen de media anualmente un 30%, según los datos de una muestra de 700 empresas europeas pertenecientes a esta comunidad empresarial.

El movimiento también ha crecido en otros países. En 2021 obtuvieron el certificado BCorp 947 empresas en todo el mundo, un 28% más que en 2020.

En total, la comunidad B Corp a nivel global cierra 2021 con 4.400 empresas procedentes de 153 industrias y 77 países de todo el mundo. Todas ellas suman una facturación de más de 125.000 millones de euros a escala internacional, de los cuales más de 5.000 millones de euros provienen de B Corps españolas, según la memoria anual 2021 que acaba de publicar BLab Spain.

Bcorp Europa Beneficios

Empresas más comprometidas con el medio ambiente y el desarrollo social

Las compañías B Corp son líderes en la implementación en sus empresas de prácticas más respetuosas con el medio ambiente y con la sociedad.

En materia de medio ambiente, el 23% de las B Corps han reducido sus emisiones y el 23% han compensado parcialmente o totalmente sus emisiones en 2021.

Además, durante el pasado año, han logrado eliminar o desviar cerca de 3 millones de toneladas métricas de residuos. En esta misma línea, el 77% de las B Corps utilizan energía renovable, el 70% realiza prácticas de conservación de agua y el 56% monitorean y registran su consumo de agua.

En cuanto a impacto positivo a nivel social y laboral, el 73% de las compañías del movimiento incluyen a mujeres en los cargos directivos y en el 45%, hay mujeres en cargos intermedios, promoviendo así la igualdad. Además, más del 66% de estas compañías apuesta por la inclusión a través de la contratación de personas que forman parte de colectivos vulnerables, cerca del 90% ofrece beneficios adicionales financieros a sus empleados y cerca del 70% de ellas ofrece tiempo libre remunerado a todos o parte de sus profesionales.

2022, el año de las empresas con propósito

Tal y como afirma el estudio “2022 ESG Trends to Watch” (Tendencias de ESG 2022) impulsado por MSCI, este nuevo año la sostenibilidad cobrará todavía más importancia, especialmente las tendencias ESG (Environmental, social and corporate governance, -Medioambientales, Sociales y de Gobernanza Corporativa, por sus siglas en inglés-). En los últimos años, dichas tendencias no sólo están siendo incorporadas por compañías de múltiples sectores, sino que han captado la atención de los inversores y organismos legislativos.

Además, según el Primer Barómetro del Propósito Empresarial en España, elaborado por APD y Transcendent, casi un 70% de las empresas cuenta con un Propósito definido. El 84% de las ellas lo tiene escrito y compartido con los empleados y casi 9 de cada 10 cree que aporta valor al negocio y contribuye a mejorar la rentabilidad de la empresa.

Nueva figura jurídica para empresas con propósito

En España, B Lab Spain, organizaciones y grandes personalidades del país, están reivindicando la creación de una nueva figura jurídica (“Sociedades de Beneficio e Interés Común – SBIC”) que reconozca a las empresas con propósito con el objetivo de impulsar la transición hacia una economía inclusiva, regenerativa y sostenible en España.

Además, en el futuro, las empresas incrementarán la medición del impacto de su actividad en materia medioambiental y social. Actualmente, ya existen muchas compañías que evalúan su impacto a través de herramientas de medición y gestión de impacto. Tal y como explica Pablo Sánchez, director ejecutivo de B Lab Spain, “más de 190.000 empresas en todo el mundo ya utilizan la Evaluación de Impacto B, un servicio gratuito que B Lab pone a disposición de todas las compañías para medir y gestionar su impacto en la sociedad y en el planeta y que ayuda a tomar decisiones para mejorar sus indicadores ambientales y sociales. Y la tendencia futura que observamos es que esta cifra siga creciendo”.

Puede acceder a la memoria anual.

Transcendent, con Ucrania

Ucrania bandera

No somos una empresa grande y solos no vamos a cambiar el mundo ni la situación actual. Pero eso no impide que intentemos hacer las cosas bien, mejorar cada día y tratar de generar un impacto positivo en la sociedad.

La realidad de Ucrania nos conmueve profundamente y creemos que no nos podemos quedar con los brazos cruzados ni mirar hacia otro lado. Por eso, desde el 1 de marzo hemos decidido donar un 1% de nuestra facturación a ACNUR, la Agencia de la ONU para los refugiados, con el objetivo de contribuir a ayudar a las más de 2 millones de personas obligadas a dejar sus casas y a huir a países vecinos desde el comienzo del conflicto.

El propósito empresarial impulsa la generación de valor

Camino Propósito Empresarial

El propósito es una palanca estratégica de generación de valor y su rentabilidad está más que demostrada. Las empresas con un propósito definido e integrado, cuyo enfoque es centrarse en la mejora de sus resultados financieros y en el bienestar común, obtienen un mejor desempeño, una valoración de mercado más alta y crean más valor para el accionista comparadas con el resto.

Esta necesidad de incorporar los aspectos ESG (sociales, medioambientales y de gobernanza) es una tendencia que no tiene vuelta atrás y que va a obligar a las empresas a transformarse haciendo del impacto una herramienta de gestión.

«El Propósito demanda cada vez más la profesionalización de los líderes empresariales»

Un nuevo liderazgo comprometido

La activación del propósito y la gestión del impacto social, medioambiental y de gobernanza se está convirtiendo en un elemento que exige una mayor profesionalización a los líderes de las empresas.

Para abordar este tema, José Antonio Labarra, CEO de ROADIS, compañía líder en el desarrollo, operación y gestión de activos de infraestructuras de transporte, se reunía recientemente con Ángel Pérez Agenjo, socio director de Transcendent, en un encuentro organizado por APD sobre el Propósito Empresarial.

El propósito como herramienta de gestión y palanca de generación de valor

Las cinco ventajas del propósito en las empresas

Existen una serie de ventajas competitivas que diferencian a una compañía que trabaja y activa el Propósito de las demás. Entre ellas cabe destacar:

  • Incrementa la rentabilidad y el valor de mercado. Las empresas con propósito mejoran su valor de mercado más rápidamente que las demás. Sin embargo, el propósito tiene un impacto positivo que va mucho más allá de la cuenta de resultados de las compañías ya que genera también muchos otros beneficios.
  • Mejora la reputación y la legitimidad para operar: Al declarar públicamente su propósito, una empresa pone de manifiesto su compromiso y los beneficios que aporta a sus grupos de interés y a la sociedad en su conjunto y eso, claramente, mejora su reputación. Por lo tanto, aquellas empresas que definen y activan su propósito, reducen significativamente el riesgo que se produzca un escándalo corporativo que erosione su licencia para operar.
  • Permite gestionar y retener el talento: El propósito empresarial es un elemento diferenciador que puede ser beneficios para esos tres aspectos dado que, desde el punto de vista de gestión de los Recursos Humanos, constituye una verdadera estrategia de employer branding.
  • Fidelización del cliente: Enfatiza la contribución única y distintiva que la empresa aporta a los grandes problemas a los que nos enfrentamos. Por esa razón, tiene el potencial de generar relaciones más sólidas con sus clientes los cuales tienden a sentirse más atraídos por compañías que transmiten autenticidad y que ellos consideran ser dignas de su confianza.  cuando una empresa fija y activa su Propósito despierta interés y atracción por parte de sus clientes.
  • Aumenta el interés por parte de los inversores: Los inversores integran cada vez más en sus decisiones criterios ESG y se interesan por el desempeño social y ambiental de las compañías.

En el caso de ROADIS su Propósito está en la creación de valor en aquellas comunidades en las que opera a través de inversiones rentables de destacados proyectos de infraestructura. Para ello, se apoya en 4 grandes atributos: ética, prosperidad, innovación y seguridad”.

El proceso de transformación hacia la sostenibilidad

La compañía liderada por Labarra decidía en 2019 dar un paso al frente y adoptar la sostenibilidad como parte de su modelo de negocio y, sobre todo, como palanca de creación de valor con el fin de llegar a ser parte activa de la transición hacia un modelo económico más responsable y sostenible.

Según su CEO “definimos un Plan de Sostenibilidad Maestro transversal a todas las áreas de la empresa ofreciendo un marco de actuación que nos permitiese tener una posición sólida en el contexto empresarial, así como llegar a ser parte activa de la transición hacia un modelo económico más responsable y sostenible”.

Por su parte, Pérez Agenjo destaca que “el mercado premia a las empresas con propósito y castiga a las que no lo tienen. Esa es ya parte del nuevo paradigma empresarial. Y por eso, para el 43% de las empresas las políticas de sostenibilidad y la gestión de los parámetros ESG se han convertido en un tema urgente”.

Medir el impacto, herramienta clave para evitar el «Impactwashing»

Pérez Agenjo asegura que establecer un sistema de medición del impacto de la compañía, fijar unos indicadores y conseguir llevarlos al centro de la estrategia corporativa es uno de los primeros pasos para combatir el ya conocido `Impactwashing´.

Para el CEO de ROADIS cuantificar y medir los impactos es imprescindible para conocer y analizar el impacto que se genera tanto en la sociedad como en el medio ambiente. Una cuantificación que no es fácil, pero que es necesaria porque lo que no se mide no se puede mejorar.

«Cuantificar y medir los impactos es imprescindible para conocer y analizar el impacto que se genera»

Para ello, han establecido un sistema de medición del impacto de la compañía, y han fijado unos indicadores con el objetivo de llevarlos al centro de la estrategia corporativa.

“En ROADIS hemos desarrollado una metodología para medir el impacto económico, social y medioambiental de nuestros activos con el fin de identificar los efectos a medio y largo plazo que generan los activos que tenemos tanto en los usuarios, como en los empleados, las comunidades, el medio ambiente, los proveedores, las instituciones y en cualquier otro actor relevante de los entornos en los que operamos. Es una herramienta valiosa que utilizamos para identificar y cuantificar los impactos desde un punto de vista más amplio. Una metodología basada en las mejores prácticas del Impact Management Project (IMP)”, concluye Labarra.

¿Están las empresas contribuyendo a la transformación social?

Trabajadora con casco fábrica

El primer informe sobre la Transformación Social de las empresas necesario para lograr los objetivos de desarrollo sostenible realizado por el  World Benchmarking Alliance (WBA) deja en evidencia el enorme camino que queda aún por recorrer.  

El estudio evalúa a las empresas más influyentes del mundo en el impacto social que éstas generan en particular en tres áreas: derechos humanos, trabajo decente y conducta ética.

Después de analizar las primeras 1000 compañías de un total de 2000 de 70 países en los cinco continentes y que suponen una cuarta parte del Producto Interior Bruto mundial, la principal conclusión es clara: el esfuerzo de las empresas es en la mayoría de los casos, escaso.

Entre las conclusiones más destacadas cabe señalar:

  • Sólo una compañía de las 1000 empresas evaluadas cumple los 18 requisitos definidos por el WBA.
  • Apenas el 1% obtiene una puntuación superior a 15 puntos sobre 20. La mitad de las empresas obtuvieron una puntuación decepcionante (entre 0 y 5 puntos).
Mapa de las 1000 empresas analizadas por el WBA

Derechos Humanos y Trabajo Decente, asignaturas pendientes

En materia de Derechos Humanos 3 de cada 4 empresas 78% de las 1.000 empresas evaluadas obtuvieron una puntuación de “cero” en los tres indicadores de control en el ámbito de los derechos humanos (HRDD-Human Resources Due Diligence criteria). Mientras el 55% de las empresas publican un compromiso serio en materia de respeto a los derechos humanos menos de la mitad de ellas lo demuestran a través de evidencia real. Una cosa es manifestar un compromiso y otras es cumplir dicho compromiso con datos y evidencia demostrable.

En lo que se refiere a Trabajo Decente, sólo el 4% de las empresas publicaban objetivos concretos o afirmaban que ya pagaban a los trabajadores un salario digno. Sólo el 4% de las empresas dicen tener control sobre el numero de horas trabajadas y apenas el 4% demuestra que identifican las desigualdades salariales, revelando las diferencias salariales entre hombres y mujeres por categorías de empleados.

Respecto a la Conducta Ética sólo el 20% de las empresas publican un enfoque de alto nivel sobre los grupos de presión y un 8% revelan su gasto en grupos de presión e influencia (políticas de lobbying). Del mismo modo, no se encontró publicación de datos de sus estrategias fiscales para el 75% de las empresas, mientras que apenas el 9% de las empresas revelan el importe de los impuestos pagados por cada jurisdicción en la que la empresa es residente a efectos fiscales.

Bandas de puntuación de las empresas en impacto social

Falta de información pública de tipo social de las empresas

Respecto a la información que publican las empresas la ausencia de información significativa sobre cuestiones sociales es sorprendente. La puntuación más común en toda la muestra es de 0 puntos sobre 20, con 116 empresas de las 1000 que no cumplen ningún requisito en ninguno de los 18 indicadores.

Sobre World Benchmarking Alliance

World Benchmarking Alliance (WBA) es una organización sin ánimo de lucro con sede en Países Bajos fundada en 2018 bajo la convicción de que la contribución del sector privado es crítica para la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas.

Con el propósito de evaluar la contribución de las principales empresas a nivel mundial a la consecución de los ODS, la primera consulta de la WBA fue lanzada en septiembre de 2017, coincidiendo con la 72ª Asamblea General de las Naciones Unidas.

En los últimos 5 años, WBA se ha posicionado como una organización reconocida a nivel internacional; y, a día de hoy, cuenta con el apoyo de diversos socios financiadores entre gobiernos, fundaciones privadas y otras corporaciones, más de 250 entidades aliadas y una plantilla de 85 empleados.

Puede acceder al informe completo aquí.

MESES DECISIVOS PARA EL VIAJE DE LA EMPRESA HACIA EL IMPACTO

Artículo viaje otoño

Ha llegado septiembre. El septiembre más raro que casi todos recordamos. Pero septiembre significa comienzo para la mayoría de nosotros. En medio de la vuelta a la rutina septiembre nos trae comienzos. ¿Qué comienzos nos esperan este año? ¿Se van a producir grandes disrupciones en el mundo de la empresa en este otoño diferente? ¿Cómo nos preparamos?

Estas son algunas de las inercias que ya estamos detectando y que creemos que se van a ir consolidando en los próximos meses:

1. La inversión de impacto aguantará mejor el temporal

Desde el punto de vista financiero, los fondos de inversión de impacto están demostrando un mejor desempeño y mayor resiliencia que el resto de fondos. Esta realidad refuerza la importancia de este tipo de inversiones, convirtiéndose en una palanca para la transformación de todo el sector empresarial.

2. El consumidor está cambiando sus preferencias de consumo

Y ese cambio se está acelerando con la pandemia. Aunque seguirá habiendo grandes inconsistencias en los hábitos de compra del consumidor y permanecerá la dualidad- comodidad/ inmediatez versus sostenibilidad/impacto, la tendencia a demandar productos y servicios más sostenibles se está consolidando con fuerza.  

3. La hoja de ruta europea hacia una economía sostenible

El Pacto Verde Europeo, junto con un mecanismo de Transición Justa que destinará 100.000 millones de euros durante el período 2021-2027 a fin de mitigar el impacto socioeconómico de la transición hacia una economía baja en carbono, impulsará la transformación de la empresa. 

4. La empresa, protagonista en la recuperación

La idea de que la empresa tiene un rol protagonista en la recuperación está cobrando cada vez más fuerza. Ante una situación de incertidumbre económica sin precedentes, muchas empresas se están convirtiendo en el referente para sus empleados, proveedores, clientes, así como para otros grupos de interés.

5. La profesionalización del propósito

Sólo el 7% de los CEOs del Fortune 500 cree que sus compañías deberían “centrarse principalmente en conseguir beneficios y no distraerse con objetivos de tipo social. Y es que aunque el capitalismo ha conseguido catalizar un progreso enorme se ha encontrado con grandes dificultades para hacer frente a asuntos de gran complejidad como el cambio climático o la desigualdad”, según McKinsey y su estudio “Purpose: Shifting from why to how”.  

6. Generación de ingresos en el corto plazo vs largo plazo

El impacto económico del COVID en muchos sectores de actividad exigirá que las acciones de impacto social empresarial que se pongan en marcha estén más focalizadas en la generación de ingresos de forma inmediata en el corto plazo, minimizando los costes. Esto supone huir de las actividades tradicionales de la RSC que en muchos casos actúa como centro de coste hacia acciones con impacto directo en la mejora de la cuenta de resultados.

El mundo hacia el que vamos será sin duda distinto al conocido hasta ahora. Los directivos de las empresas tienen la oportunidad para repensar y reimaginar su propósito y el rol que van a tener sus compañías en el futuro. Pueden continuar con sus líneas tradicionales o explorar nuevos modelos de negocio más adaptados a los nuevos hábitos y preferencias de los consumidores, que sin duda habrán cambiado y que exigirán que el propósito y el impacto social estén en el centro de su actividad.

Todo ello va a impulsar la transformación de la empresa hacia el impacto social empresarial.

¿Quiénes tendrán éxito?

Todo apunta a que tendrán éxito aquellas empresas que consigan incorporar la sostenibilidad y el propósito a nivel estratégico en la organización convirtiéndose en una ventaja competitiva.

Frente al cortoplacismo, rigor y medición

Durante la pandemia, muchas empresas han puesto en marcha acciones para apoyar a sus grupos de interés en función de sus necesidades. Ahora toca poner estructura y rigor para que estos esfuerzos no se queden en un ejercicio cortoplacista y de contingencia y para dotar al sector empresarial de mayor resiliencia en el largo plazo.

También es momento de poner en valor su contribución a la sociedad midiendo el impacto generado y adquiriendo compromisos tangibles en el medio y largo plazo con la sociedad y con el medioambiente.

En cualquier caso, vemos con claridad que lo importante es la consistencia y la coherencia. No es momento del Green Washing. Es el momento de los valores y del propósito. Con mayúsculas. Desde dentro. Desde arriba. En todos los procesos. En cada departamento. En toda la cadena de valor. Implementado profesionalmente y desde el seno de la organización. Para resistir. Para avanzar. Para mejorar. ¡Descubre más en nuestro blog!

es_ES